Se acabó la monocromía y los tonos neutros, los colores ácidos y atrevidos son la nueva tendencia para afrontar el otoño-invierno 2014.
Ya lo anunciaban las pasarelas y las colecciones de moda se llevan los colores ácidos y con mucha fuerza pero parecía una tendencia un tanto complicada para interiores pero finalmente este otoño invierno los colores fluorescentes ponen un toque de color original en nuestras casas.
Es hora de llenar de color nuestras vidas y este año los hacemos con tonos vibrantes y frescos que nos llenan de energía y positivismo. La paleta de moda está compuesta por los llamados colores más “trendy” y nos trae un nuevo naranja, al que Pantone ha nombrado como Celosía Orange, el amarillo o Freesia, el Hemlock (o lo que viene siendo un verde mentolado), el azul eléctrico o el cayenne. Todos colores con una fuerte personalidad que convertirán cualquier estancia en un lugar especial pero a los que hay que tratar con mucho cuidado, una sobrecarga de esta tendencia ácida podría ser penosa en cualquier estancia.
Nuestro consejo es que si no estás muy seguro la integres en una justa medida, poquito a poco. Consiguiendo algún detalle con algún complemento decorativo o algún mueble pequeño. También puede ser una idea pinta una pequeña pared de casa con un color llamativo, si el resto de la estancia está en colores neutros conseguirás un fuerte contraste que dará vida a la habitación sin demasiado esfuerzo.